Home > Tu Salud > Adolescencia Sana > ¿Cómo están tu sueño y tu descanso?

El sueño es un estado fisiológico, activo y rítmico, que aparece cada 24 horas y se alterna con la vigilia, tu otro estado de conciencia básico.

El sueño es una necesidad vital, como comer. Su función es restaurar tu cerebro y tu cuerpo y nada la reemplaza.

Mucha atención, si no duermes hay riesgos para tu vida. Veamos:

Durante el sueño se fija la memoria, se regeneran tejidos y se reparan células dañadas por el stress diario. Mientras duermes, tu cerebro sigue activo, atravesando las cinco fases del sueño, denominadas fase 1, 2, 3, 4 y MOR (movimientos oculares rápidos; REM en inglés), esto es un ciclo de sueño. Un ciclo completo de sueño dura entre 90 y 100 minutos. En promedio, en una noche, puedes experimentar de cuatro a cinco ciclos de sueño.

Es en la fase 4, o de sueño profundo, en la que algunas personas hablan o son sonámbulas y en ella es difícil ser despertado.

En la última fase, o MOR, tus músculos están totalmente relajados pero tus ojos se mueven rápidamente y aumenta tu ritmo cardíaco. ¡Esta es la fase en la que sueñas! Todos soñamos, pero no siempre recordamos nuestros sueños.

¿Qué hace tu cerebro cuando sueñas? Algunos científicos creen que el soñar es la forma como el cerebro clasifica lo que sucede durante el día. Lo importante queda almacenado en la memoria y el resto desaparece.

Durante el sueño se produce la hormona del crecimiento, llegando al máximo alrededor de la medianoche y en sueño profundo, por esto es importante que niños y adolescentes se acuesten temprano para poder dormir entre 8,5 y 9,5 horas cada noche.

Es posible que tengas problemas para dormir debido a que sumas muchas actividades, exigencias académicas, salidas, etc., y dejas pocas horas para el sueño. Si te duermes tarde y te cuesta levantarte en la mañana, y entonces durante el día sientes sueño y quieres dormir, es porque tienes un déficit de sueño. Esto se debe a la falta de buenos hábitos de sueño, que te entregan mala calidad, menor duración y fragmentación de tu sueño.

Este déficit afecta tu salud a corto y largo plazo. Disminuye tu capacidad de atención y memoria, y por tanto tu rendimiento académico y deportivo, te puede producir tristeza y depresión, aumenta tu riesgo de obesidad y diabetes y más adelante puede causar accidentes si conduces o manejas maquinaria.

 

Algunas propuestas para mejorar tu sueño: 

  • Tu habitación debe estar temperada y aislada de la luz y el ruido. Evita lo que te pueda distraer para dormir, como posters, luces, pantallas, etc.

  • Usa la cama solo para dormir, evita trabajar, estudiar o ver televisión en ella.

  • Practica ejercicio en las mañanas o temprano en las tardes (hasta 6 horas antes de dormir).

  • Exponte a la luz del día.

  • Evita las siestas de más de una hora.

  • Mantén horarios regulares para acostarte y levantarte durante toda la semana, incluidos los domingos o festivos.

  • Evita el alcohol en la noche. Este altera la calidad del sueño profundo.

  • Evita el café, el té, las bebidas cola y el tabaco. Estos dificultan conciliar el sueño.

  • Evita comer en forma abundante antes de dormir. Si tienes hambre, toma una colación liviana, como un vaso de leche, un yogurt o postre de leche.

  • Evita las películas de acción y los juegos de videos en la noche.

  • Si vas a salir y acostarte tarde, “junta sueño”, es decir, duerme una siesta larga antes de salir.

  • Aunque te acuestes tarde trata de levantarte a la hora que lo haces habitualmente y trata de no dormir siesta. Esto ayudará a que tengas sueño a la hora de acostarte.

¿Cómo saber si duermes lo suficiente?

Todos tenemos insomnio de vez en cuando, pero debes consultar a tu médico si es que:

  • Tienes problemas para dormir en forma regular.

  • Crees que esto afecta tu desempeño o tu estado de ánimo.

  • Te cuesta levantarte por las mañanas.

  • Tienes dificultad para dormirte en la noche.

  • Te quedas dormido en tus actividades diarias.

  • Estás triste o deprimido.