¿Qué es el acné?

El acné es una enfermedad de la piel que afecta especialmente a los adolescentes, se estima que entre el 79% y el 95% de ellos lo sufre en el mundo occidental.

Cada poro en la superficie de la piel contiene un cabello y una glándula sebácea. Esta tiene la función de remover las células viejas de la piel, mantenerla lubricada y prevenir el resecamiento de los tejidos.

Si hay un exceso de sebo y demasiadas células muertas, los poros se obstruyen. Entonces, las bacterias (especialmente las de la especie Propionibacterium acnes) pueden quedar atrapadas dentro de los poros y reproducirse, haciendo que la piel se hinche y enrojezca, y dando inicio al acné.

¿Hay relación entre el acné y la alimentación?

Durante muchos años se pensó que la dieta no influía en la aparición del acné. Se les decía a las personas que lo tenían que no consumieran algunos alimentos (chocolate, masas dulces y bebidas azucaradas), pero esto no pasaba de ser una recomendación.

Nuevos estudios han concluido que la dieta sí afecta a tu piel, o sea, lo que comes influye en la aparición del acné. Una dieta rica en hidratos de carbono refinados y azucares como el pan y las masas dulces (que tienen un alto índice glicémico) puede hacer más severo el acné. Esto porque aumenta la insulina en la sangre y con ello la respuesta hormonal que produce el acné.

Pueblos sin acné

Una muestra de esto es que en algunos pueblos como los Inuit (Ártico de América y Groenlandia), los isleños de Okinawa (Japón), los cazadores nómadas Ache (Paraguay) y los isleños Kitavan (Papua Nueva Guinea) no sufren de acné. Sus dietas, al contrario de la occidental, se basan en pescado, vegetales, frutas y cereales. En Australia se hizo un estudio que concluyó lo mismo. Un grupo de jóvenes se alimentó con una dieta de bajo índice glicémico y otro con una totalmente inversa. Los primeros mejoraron visiblemente la severidad de su acné.

¿Qué comieron los que mejoraron el acné?

Principalmente alimentos no procesados, pan y cereales integrales, verduras, frutas frescas, legumbres, pescados y mariscos, pollo y carnes rojas magras, lácteos semidescremados, margarina de aceite de Canola, aceite de oliva y frutos secos. Es decir, una dieta de bajo índice glicémico.

¿Qué comieron los que permanecieron con el acné?

Comieron más alimentos procesados como jamón, masas dulces y jugos azucarados, cereales refinados y pan blanco. Lácteos descremados, margarina y aceite de maravilla y soya. Menos verduras y frutas que el otro grupo.

Recomendaciones de alimentación para controlar el acné

Lo más indicado es que tengas una alimentación equilibrada como la alimentación mediterránea (link). No abuses de alimentos procesados y refinados, como embutidos y cecinas, masas dulces, snacks, barritas azucaradas, queques, galletas, pasteles, sopaipillas, bebidas azucaradas, pan blanco, pastas hechas con harina refinada, cereales refinados, etc.
Que tu alimentación sea rica en verduras y frutas. Come cereales, arroz, pan y pastas integrales. Legumbres como porotos, lentejas y garbanzos, carnes blancas y mucho pescado. Margarina y aceites como el aceite de canola y de oliva. Evita las carnes rojas grasas, la mantequilla y la crema de leche.
Prefiere beber agua o jugos naturales sin azúcar.
Una buena noticia: no hay ningún estudio que demuestre que el cacao promueva el acné, como muchos creen. De todas formas, no es recomendable que comas mucho chocolate, más que nada por la cantidad de azúcar que contiene. Si vas a hacerlo, prefiere el chocolate negro, con un contenido de cacao superior al 50% y con poca azúcar.